Jeremy Renner la nueva estrella de Hollywood

Hay algo verdaderamente invisible en el rostro de Jeremy Renner. Es la mirada de un hombre que no está allí. No, no está. A medida que avanza la película uno va reconociendo mínimos detalles de su estructura corporal hasta hacerse una idea bastante acabada de quién es el hombre. Pero, tal como ocurre con ciertos actores –Kevin Spacey, por ejemplo–, esta reconstrucción es ilusoria. Un truco más del séptimo arte y su gente. Jeremy, entre ellos.De modo que, aunque su filmografía es extensa y muy rica, Renner ha logrado mantenerse fuera de foco, lejos, muy lejos de aquí cuando se ríe enfrente de nuestras narices. Interpretó a Jeffrey Dahmer en "Dahmer", la película sobre la vida y "obra" del también conocido como "El Carnicero de Milwaukee"; fue Brian Gamble en la adrenalínica "S.W.A.T.", el bandido James Wood Hite en "El asesinato de Jesse James", protagonizada por un estupendo Brad Pitt, y el sargento Doyle, "exterminador de zombis", en "28 semanas después". ¿No lo recuerdan? ¿No? ¿Más o menos? Ésta es mucho más fácil: fue el sargento primero William James en "Vidas al límite" ("The Hurt Locker"), el premiado filme de Kathryn Bigelow. Renner también fue James "Jem" Coughlin en la última película dirigida y protagonizada por Ben Affleck. Pero ¿quién se acuerda de ello a esta altura de la historia? De lo que sí es probable que muchos se acuerden es de su personaje Ojo de Halcón, el militar solitario y hábil con el arco que forma parte del equipo de "Los Vengadores". Y también de su papel, junto a Tom Cruise, en la última "Misión imposible 4: protocolo fantasma", donde encarna a William Brandt, un agente en el que Cruise confía y desconfía al mismo tiempo.Como uno puede suponer, Renner es mucho más que un actor destinado a encarnar a un superhéroe.Se cumple una de las reglas de oro de Hollywood. El triunfo es de esos raros, rarísimos actores que logran transmitir honestidad y vigor en el reino del plástico. Renner es uno de ellos. La especie aparte a la que pertenecen Leo DiCaprio y Edward Norton, entre otros semejantes.Por estas horas, el actor sufre el síndrome del "artista encasillado en películas de acción". No deja de resultar una simpática coincidencia para alguien que de joven quería dedicarse a la criminología. No han terminado de apagarse los aplausos y los vítores de sus trabajos en "Los Vengadores", "Misión imposible 4" y "El legado de Bourne" y los grandes estudios ya han dejado traslucir que se vienen las sagas de las tres películas.En los últimos diez años Renner no ha podido darse el lujo de ponerse flácido. Dejarse la pancita no le está permitido. En el 2002 hizo a un delgado "Dahmer" y desde entonces su figura no hizo sino mejorar y mejorar. Si el negocio lo pide, cómo negarse. Para su filme más reciente "El legado de Bourne" como el letal agente Aaron Cross, el actor se sometió a un entrenamiento en artes marciales que duró cerca de dos años. Renner no utilizó dobles de cuerpo para las escenas de acción y durante las peleas fue siempre él y sólo él quien dio y recibió. "Fue difícil, pero era lo que me gustaba", dijo. En entrevistas recientes Renner advirtió que por un tiempo se mantendrá alejado del cine de acción. Acaso para volver a su primer amor, el cine dramático de corte independiente. Pero hablemos de los negocios: más allá de lo bien que pueda interpretar a un oscuro asesino atormentado por sus recuerdos infantiles, la tribuna le exige a Renner que vaya dibujando un nuevo capítulo de la saga Bourne. El actor hasta dejó traslucir que Bourne y Cross podría cruzarse en algún momento. "Yo mismo pienso en ello, en diferentes posibilidades para unir a ambos personajes en una sola película, pero no puedo decir nada más", aseguró.Por lo pronto, volverá este año a la pantalla grande con dos tanques. Lo hará en "Red 2", la segunda parte del filme que tiene al serio exagente Frank Moses (Bruce Willis) como protagonista. Y en "Hansel y Gretel: cazadores de fantasmas", o la versión siglo XXI del tradicional cuento de los hermanos Grimm."¿Que si les añado deliberadamente ambigüedad moral a mis personajes? Por supuesto que lo hago. Nadie quiere ver a un chico bueno mandándose cagadas sin que nada malo le suceda. Lo que hace que la gente siga viendo y escuchando una película es el personaje. Y cuando los villanos logran empatía con el público, ahí tienes tu película", le dijo a "The Guardian".El actor llegó en la fase ascendente de uno de esos ciclos que caracterizan a Hollywood. Porque es cierto que la industria tiende a alimentarse de aquello que expulsa a la masa. Pero no siempre este juego de cambio y recambio de tópicos consagrados le ha salido bien. Recordamos temporadas completas de películas que revisaban sin suerte viejos títulos del pasado. Ejemplos hay varios. Renner, sin embargo, es un actor que sabe elegir de lo que trae el reflujo de la marea. Sus "remakes", sus sagas y versiones han sido una fotografía agradable de ver. "¿No es todo un constante remake? Para mí, realmente sólo existen doce tipos de historias que contar. Empieza con la mitología griega, para que después Shakespeare la reescriba bajo su visión… ¡y que luego llegue Tarantino y haga lo mismo! Pero lo que quiero decir es que, en general, las historias son constantes repeticiones contadas de forma distinta", ha explicado el actor.Como es de esperar, como debe ser, volverá Renner como Aaron Cross y quizás se cruce entonces o después con Jason Bourne, volverá a levantar el arco tenso de Ojo de Halcón para un historia propia y explosiva y regresará con "Los Vengadores" en la segunda y esperada película que reúne a las potencias de Marvel.Como sea, podemos estar contentos: Jeremy Renner volverá.

FUENTE :   http://www.rionegro.com.ar/diario/jeremy-renner-la-nueva-estrella-de-hollywood-1058335-9523-nota.aspx